Hazlo

Cuando en nuestra rutina se produce un cambio, por muy pequeño que sea, hace que todo se descoloque, que no dejemos de pensar en ese cambio, y que hagamos de un grano de arena una montaña. 


Tomar decisiones no es fácil, como ya dije antes, y más si sabes que esas decisiones van a afectar a otras personas. Siempre que hay que tomar una decisión difícil nos ponemos nerviosos, nuestra mente se nubla, entramos en un estado de confusión que altera todo. Necesitamos gritar, correr, saltar y en mi caso escribir. ¿Pero por qué ponernos así?, estoy segura que la mayoría de las veces habrá cosas peores. Tómate tu tiempo, piensa en las consecuencias de tus actos, a quien le afectará tu decisión, no pienses en que pasará si lo hago, hazlo, creo que la vida es lo suficientemente corta como para desperdiciarla. Nos equivocaremos por supuesto que sí, pero que persona no se ha equivocado alguna vez, a caso de los errores no se aprende, ¿por qué ese miedo a fallar?, si ese miedo nos hace más fuertes, aumenta nuestra confianza, nos hace grandes.
Hace poco tomé una decisión muy importante, algo que no había hecho nunca, claro que pensé que podría equivocarme y arrepentirme de haber tomado esa decisión, pero esta vez me salió bien. De las caídas se aprende, sabes donde no hay que pisar y aprendes a levantarte con o sin ayuda de nadie.
Tendremos que tomar muchas decisiones en esta vida, a veces tendremos a alguien que nos aconseje (pero recuerda que la decisión la tomas tú) y otra veces no habrá nadie que nos diga lo que él haría. Hay que aprender a confiar en uno mismo, fallar nos hace personas.