lunes, 19 de diciembre de 2011

Arriesgar.

Hoy me he parado a pensar en la cantidad de gente que hay o ha habido en mi vida. No soy una chica popular precisamente, pero creo que he ganado más que aquellas a las que les atribuimos ese término por las apariencias y la facilidad de hacer amigos. 
Uno de mis muchos defectos es sin duda la timidez, lo odio, es lo que menos me gusta de mi. Pero esa timidez no ha evitado que conociese a numerosas personas que han marcado significativamente mi vida. 
Yo soy de esas que prefieren estar calladas, observar los pequeños detalles de las personas que hablan a mi alrededor, e intentar imaginar sus vidas, gustos, rarezas...


Todo comenzó cuando llegué al instituto, todas mis amigas se habían ido a otro distinto, yo no conocía a nadie, estaba sola y mi timidez e inseguridad no ayudaban mucho. Llegue a la clase, caras nuevas.Vi a una chica muy bajita y de tez morena, media melena negra como el carbón y unos ojos grandes muy expresivos, le pregunté si me podía sentar con ella y me respondió que por supuesto, de hecho se iba a sentar con otra chica, pero finalmente se sentó conmigo. 
Gracias a ella conocía a otra gran amiga mía, que me demostró que las apariencias no son lo importante, ya que no creo que encuentre un corazón como el suyo.
El comienzo no había sido nada malo, ya tenía dos amigas. Pero más tarde las cosas cambiarían.
Se iniciaría una fuerte amistad de tres chicas muy diferentes, muy aplicadas, ingenuas e inocentes, mi timidez desaparecía cada vez que me juntaba con ellas.  En ese momento descubrí lo que era tener una mejor amiga. Pasamos a segundo, une de ellas y yo caímos en la misma clase, y otra, que se fue distanciando desde el principio cayó en una clase distinta. Primero había sido un buen año, no era popular, pero tenía una de las mejores personas conmigo. A mediados del segundo trimestre algo hizo que nuestra amistad se fuera desvaneciendo, poco a poco, ella estaba cambiando, no quería absorberla, es decir que mi timidez impidiese que ella se relacionase con otra gente. Así que decidí dar un cambio, tomar una de las decisiones que más ha influido en mi vida, dejar de un lado las inseguridades.Cambié de grupo.
Esta vez éramos seis, dos de ellas siguen siendo grandes amigas mías, una se volvió realmente insoportable de las que cuando te ve por la calle no se digna a mirarte y si lo hace, lo hace por encima del hombro. Otra cambió de grupo repentinamente. Y la última sigue siendo una buena amiga aunque hayamos perdido un poco el contacto. 
Éramos tres, durante el último trimestre de segundo y tercero de la ESO. En cuarto el grupo aumentaría. 
No recuerdo muy bien como comenzó nuestra relación, tan solo tengo una vago recuerdo de un día que fuimos a jugar a tenis y se unieron dos chicos y una chica. En ese momento no me imaginaba que se fuera a entablar una relación tan sólida. Y más tarde conocería a una chica que se ganaría buena parte de mi corazón, mis sister.
No somos un grupo multitudinario, no bebemos (a excepción de algunos xD), no fumamos, no somos excesivamente populares, pero creo que entre nosotros hay una relación que poco llegan a alcanzar. Cada uno a su manera me ha aportado algo, y aunque nos tengamos que separar por los estudios, creo que esta relación será difícil de romper.
 Obviamente conozco a más gente, que tan bien han sido bastante significantes en mi vida, pero si hablase de ellos me tiraría una vida entera. 
Ha habido momentos durante esos años de instituto que me han hecho sufrir bastante, en los que tuve que tomar decisiones arriesgadas, dudaba mucho, pero creo que sin no hubieran sucedido nunca habría llegado hasta donde estoy.

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