domingo, 17 de abril de 2011

La verdad

Un día en clase de filosofía el profesor pregunto si siempre había que decir la verdad, en ese momento pensé por supuesto que sí, todas las personas tienen derecho a saber la verdad.
Uno de mis compañeros le contestó que no había que mentir pero siempre estaban las mentiras ''piadosas''.
Por ejemplo una persona enferma de cáncer a la que le quedan dos meses de vida, deberíamos decírselo?, tiene derecho a saberlo por supuesto que sí, a ver  pongámonos en la situación en la que se lo decimos, esa persona podría actuar de dos maneras, una sería resignarse y pasarlo mal pensando en todo aquello que no ha podido hacer, pero por otra parte podría hacer todo aquello que a deseado hacer desde siempre, vivir la vida al limite con los amigos, etc.
Pero y si no se lo decimos, esa persona viviría su vida como el día a día, y a los dos meses todos sus sueño se esfumarían sin ni siquiera haber salido a la luz.
Supongo que por la forma de expresar este texto hasta ese momento yo estaba de acuerdo en que siempre había que decir la verdad.
Pero cuando se trata de tu caso, cuando las verdades o mentiras te afectan a ti de lleno, quizás mi opinión cambie, cuando te das cuenta de que te han mentido durante años y tenías una imagen tan equivocada de esa persona..., ahora me pregunto como reaccionaré cuando lo vea, como mirarle a la cara después del daño que causó, la verdad nos hace madurar muy rápido y sin embargo la mentira nos retiene en una ignorancia infinita, por eso si ahora me preguntasen si siempre hay que decir la verdad, sinceramente no sabría que responder...

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